Sistema nervioso

Sistema nervioso

Sistema nervioso periférico

El sistema nervioso central (SNC) es la parte del sistema nervioso formada principalmente por el cerebro y la médula espinal. El SNC se llama así porque el cerebro integra la información recibida y coordina e influye en la actividad de todas las partes del cuerpo de los animales con simetría bilateral, es decir, todos los animales multicelulares excepto las esponjas y las medusas. Se trata de una estructura compuesta por tejido nervioso situada a lo largo del eje rostral (extremo de la nariz) al caudal (extremo de la cola) del cuerpo y puede tener una sección ampliada en el extremo rostral que es un cerebro. No todos los animales con sistema nervioso central tienen cerebro, aunque la gran mayoría sí lo tiene.
En los vertebrados, el cerebro y la médula espinal están encerrados en las meninges[2]. Las meninges proporcionan una barrera a las sustancias químicas disueltas en la sangre, protegiendo al cerebro de la mayoría de las neurotoxinas que se encuentran habitualmente en los alimentos. Dentro de las meninges, el cerebro y la médula espinal están bañados en líquido cefalorraquídeo, que sustituye al líquido corporal que se encuentra fuera de las células de todos los animales bilaterales.

Partes y funciones del sistema nervioso

El sistema nervioso es el principal sistema de control, regulación y comunicación del organismo. Es el centro de toda la actividad mental, incluidos el pensamiento, el aprendizaje y la memoria. Junto con el sistema endocrino, el sistema nervioso es responsable de regular y mantener la homeostasis.
Al igual que otros sistemas del cuerpo, el sistema nervioso está compuesto por órganos, principalmente el cerebro, la médula espinal, los nervios y los ganglios. Éstos, a su vez, están formados por varios tejidos, como el nervioso, el sanguíneo y el conectivo. Juntos llevan a cabo las complejas actividades del sistema nervioso.
Millones de receptores sensoriales detectan los cambios, llamados estímulos, que se producen dentro y fuera del cuerpo. Controlan cosas como la temperatura, la luz y el sonido del entorno externo. En el interior del cuerpo, el medio interno, los receptores detectan las variaciones de la presión, el pH, la concentración de dióxido de carbono y los niveles de diversos electrolitos. Toda esta información recopilada se denomina entrada sensorial.
La entrada sensorial se convierte en señales eléctricas llamadas impulsos nerviosos que se transmiten al cerebro. Allí, las señales se reúnen para crear sensaciones, producir pensamientos o añadirse a la memoria; en cada momento se toman decisiones basadas en la información sensorial. Esto es la integración.

Sistema nervioso central

Sistema nervioso simpáticoIlustración esquemática que muestra el sistema nervioso simpático con el cordón simpático y los órganos diana.DetallesIdentificadoresLatinpars sympathica divisionis autonomici systematis nervosiAcrónimo(s)SNSMeSHD013564TA98A14.3.01.001TA26601FMA9906Terminología anatómica[editar en Wikidata] El sistema nervioso simpático (SNS) es una de las dos divisiones del sistema nervioso autónomo, junto con el sistema nervioso parasimpático[1][2] El sistema nervioso entérico se considera a veces parte del sistema nervioso autónomo, y a veces se considera un sistema independiente[3].
El sistema nervioso autónomo funciona para regular las acciones inconscientes del cuerpo. El proceso principal del sistema nervioso simpático es estimular la respuesta de lucha o huida del cuerpo. Sin embargo, está constantemente activo a un nivel básico para mantener la homeostasis[4] El sistema nervioso simpático se describe como antagónico al sistema nervioso parasimpático, que estimula al cuerpo para “alimentarse y reproducirse” y para (después) “descansar y digerir”.

Esquema del sistema nervioso

El sistema nervioso es la parte del cuerpo de un animal que coordina su comportamiento y transmite señales entre las distintas zonas del cuerpo. En los vertebrados consta de dos partes principales, denominadas sistema nervioso central (SNC) y sistema nervioso periférico (SNP). El SNC contiene el cerebro y la médula espinal. El SNP está formado principalmente por los nervios, que son fibras largas que conectan el SNC con todas las demás partes del cuerpo, pero también incluye otros componentes como los ganglios periféricos, los ganglios simpáticos y parasimpáticos, y el sistema nervioso entérico, una parte semiindependiente del sistema nervioso cuya función es controlar el sistema gastrointestinal.
A nivel celular, el sistema nervioso se define por la presencia de un tipo especial de célula, llamada neurona, también conocida como “célula nerviosa”. Las neuronas tienen propiedades especiales que les permiten enviar señales de forma rápida y precisa a otras células. Envían estas señales en forma de ondas electroquímicas que viajan a lo largo de finas fibras llamadas axones, que hacen que se liberen sustancias químicas llamadas neurotransmisores en las uniones con otras neuronas, llamadas sinapsis. Una célula que recibe una señal sináptica de una neurona (una neurona postsináptica) puede ser excitada, inhibida o modulada de otro modo. Las conexiones entre neuronas forman circuitos neuronales que pueden generar patrones muy complejos de actividad dinámica. Junto con las neuronas, el sistema nervioso también contiene otras células especializadas llamadas células gliales (o simplemente glía), que proporcionan apoyo estructural y metabólico. Recientemente se ha demostrado que la glía también puede desempeñar una importante función de señalización.